Toda mujer, sin distinción de raza, credo, estrato social, tiene todo derecho a ser protagonista de su propia vida, decidir libremente lo que desea ser, sopesando los pros y los contras de acuerdo a sus capacidades y posibilidades, siempre pensando en mantener y/o fortalecer su autoestima. La mujer que por alguna razón se olvida de su propio valor, debe revalorizarse y enfocar sus planes, explotar sus conocimientos o adquirir nuevos, que por sencillos que esos conocimientos sean, le de satisfacciones personales y traigan resultados positivos para su familia, todo esto significa hacer valer sus derechos.
Sin embargo y a pesar de todo, aún hay muchas mujeres que sufren porque no tienen la libertad para decidir en sus vidas, en algunas sociedades ni siquiera tienen el derecho de escoger con quien y cuando casarse, no se trata tampoco de que la mujer en su lucha por la igualdad de género, ocupe el lugar del hombre, pero si de que luchen juntos por los cambios que al final son de beneficio para toda la familia.Erradicar los esquemas patriarcales debería ser un compromiso, para ejercer una actuación igualitaria entre hombres y mujeres, que los involucre en tareas tradicionalmente “de mujeres”, como el cuidado de los hijos y labores del hogar, así como también ambos aprender a controlar sus emociones para no caer en el maltrato físico de ninguna de las dos partes, aprender que sus relaciones personales no se basan en la violencia ni la competencia, de esa forma las relaciones en su familia y con su pareja alcanzarían un mejor nivel y la convivencia con sus hijos sería más cercana.Es totalmente impredecible como será un matrimonio, mejor dicho cómo será el comportamiento de la pareja, por lo que es recomendable poner atención a los cambios de comportamiento y/o trato hacia la pareja, el maltrato y alejamiento es progresivo, callar no soluciona el problema, tampoco se pueden esperar cambios positivos, los problemas vistos a tiempo podrían tener solución si los dos trabajan en ello.
NO MÁS VIOLENCIA:
Lamentablemente a pesar de la defunción por todos los medios, la violencia no se ha reducido, mucho son los actos violentos hacia la pareja que quedan en la impunidad, aún falta cobertura, porque aún hay mujeres que no comprenden que la violencia dentro del hogar no es aceptable, ningún ser humano es merecedor de maltrato físico o psicológico, el que se siente con más poder, ya sea por su fuerza física o por su posición económica, aprovecha a sobajar a su pareja al extremo de hacerla sentir obligada a soportar las peores humillaciones, amenazando e intimidando utilizando a los hijos como excusa.
Nunca será mucho lo que se hable acerca de ese fenómeno, luchemos por la erradicación del maltrato de género, denunciando al agresor, si de cada diez mujeres maltratadas, logramos ayudar a una, estaremos dando los pasos necesarios.
© Autor: Amanecer cautiva del amor.
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